Primeros Auxilios

El pasado 23 de noviembre, dentro del área de Educación Física, pudimos contar con la visita de Javier el cual es, a su misma vez, profesor de dicha área pero en otro colegio y experto en primeros auxilios.

Aprendimos cantidad de cosas y muy importantes todas ellas. En primer lugar, nos habló de cómo deberíamos actuar en caso de producirse alguna herida o quemadura y, en estas situaciones, el protocolo a seguir nos indica que lo que tenemos que hacer es presionar un paño o gasa, preferiblemente, limpia y húmeda sobre la zona afectada.

Posteriormente, nos explicó los síntomas de un ictus y, sobre todo, incidió en la importancia de actuar de forma inmediata mediante un acróstico que quedaba del siguiente modo:

Face: fijarnos si la persona tiene algún lado de la cara dormido. Por ejemplo, si al sonreír sólo lo hace con media cara

Arms: al igual que en el caso anterior, fijarnos si la persona pierde fuerza en uno de los brazos

Speak: esto es si la persona dice incoherencias cuando habla o, pese a tratarse de conversaciones habituales, no encuentra las palabras adecuadas

Time: no perder tiempo y, cuanto antes, llamar a los servicios de emergencia al 112

Más tarde hablamos también de los atragantamientos ya que éstos pueden ser más frecuentes de lo que, en principio, podemos suponer y, especialmente, entre la población infantil. Podemos clasificarlos en leves o graves.

En caso de un atragantamiento leve, simplemente debemos invitar a la persona a que tosa ya que, mientras se produzca tos, significa que el aire puede pasar y, de este modo, se acabará expulsando el objeto o alimento.

En caso de atragantamiento grave, lo más probable es que la persona no pueda toser y, por tanto, tampoco pueda expulsar por sí misma el objeto o alimento. Así pues, procederíamos a alternar 5 palmadas en la espalda de la persona en cuestión con la realización de 5 maniobras de Heimlich. Dicha maniobra, la cual ha salvado muchas más vidas de las que a priori podemos pensar, es muy sencilla y consiste en tomar a la persona por la espalda y ubicar un puño por encima del ombligo y debajo de la caja torácica. Poner la palma de la otra mano por encima de nuestro puño y, de este modo, ejercer fuerza con movimientos rápidos y de abajo a hacia arriba (con forma de J).

Práctica atragantamiento en bebés

Seguidamente, procedió a explicarnos qué hacer en caso de desvanecimiento. Para ello, lo primero que debemos hacer es llamar siempre al servicio de emergencia (112) y, posteriormente, comprobar si la persona respira o no. En caso de que respire, debemos colocar a la persona en posición de seguridad, y en caso de que no respire, debemos alternar 30 reanimaciones cardiopulmonares con 2 boca a boca y realizarlo siempre al ritmo de las canciones «Staying Alive» o «Macarena». En este último caso, si se dispone de un desfibrilador cerca, lo idóneo siempre será utilizarlo.

Practicamos qué hacer ante un desvanecimiento
Practicamos la posición de seguridad
Practicamos la posición de seguridad
Vemos cómo utilizar un desfibrilador

Finalmente acabamos realizando un taller, del cual os dejamos algunas fotos a continuación, donde pusimos en práctica todo lo aprendido. La verdad, es que nos pareció súper interesante y muy útil para la vida diaria ya que en caso de producirse alguno de estos incidentes, al menos, sabríamos cómo empezar a actuar y esto puede salvar vidas.

Práctica RCP
Práctica RCP
Práctica RCP
Cómo actuamos en situaciones de emergencia

¡Gracias Javier!