JUNE, LA DIOSA DEL MATRIMONIO Y DE LA FAMILIA

 

Yo, June Rodrigo más conocida como Juno, nací en el año 349 a. C  durante el Imperio Romano, concretamente en la región de Creta.

Vivía en el Olympo junto a mi madre Minerva, diosa de la sabiduría y lo oficios y mi padre Apolo, dios griego, que profetizaba el futuro, y mis dos hermanos mayores: Júpiter, dios de los cielos y Marte; dios de la guerra.

Como todos los otros dioses, yo tenía un poder que me diferenciaba de la gente corriente, podía encontrar el alma gemela del elegido/a y así poder emparejarles de por vida.

Con tan sólo 13 años, mis padres me enviaron a un campamento para dioses junto a mis hermanos para que pudiéramos aprender más cosas sobre nuestro trabajo en el mundo y así poder desarrollar nuestros dones.

Una semana más tarde ya habíamos llegado y comenzado a entrenar. Había tanto pruebas físicas como mentales, según tu don tenía más pruebas físicas o más pruebas mentales y en mi caso, yo tenía más pruebas mentales. En cambio, mis hermanos al ser los dioses del cielo y de la guerra se fueron más por el camino físico. Mientras, nuestros padres ejercían sus cargos como dioses. A veces venían a visitarnos y a dar alguna clase sobre un punto en concreto, pero esto no pasaba muy a menudo.

A la corta edad de 18 años, dejé el campamento atrás y comencé mis labores como diosa. Resolvía los problemas de los romanos y emparejaba a mis elegidos. Pero lo que nunca pensé fue en si habría un elegido para mí.

Un día cálido de verano cuándo yo cumplía 25 años, me fui a pasear por los alrededores de un lago y encontré a un joven bañándose en él. Me enamoré perdidamente, comenzamos a hablar y descubrí su nombre, Luke Dawson, hijo de Poseidón; dios de los mares y de una ciudadana llamada Raquel.

Un año más tarde, me casé con él en la sala de los cuervos. Pronto tuvimos 3 preciosos hijos, sus nombres eran Hércules, Plutón y Neptuno.

Hoy en día, vivo en las montañas perdidas del más allá, junto con mi familia dónde ningún humano nos pueda encontrar.